En 2010, después de concluir sus estudios en la BAU de Barcelona, la diseñadora tapatía Sara Arámburo da comienzo a la marca creativa Sara Miau a través de un blog. Las ilustraciones son el inicio de su desarrollo artístico, un estilo que se enfoca en resaltar rasgos femeninos y complementarlos con elementos de moda victoriana dota de carácter distintivo sus creaciones.
Sobre el descubrimiento de un estilo propio, Sara comentó que fue importante su paso por España: “Estudiar en Barcelona fue un gran impulso para definir la marca”. Si bien sus producciones ya tenían una temática medianamente definida, el adentrarse a métodos artísticos experimentales fue la pieza clave para su desarrollo creativo.
De manera autodidacta, la pasión por la ilustración mutó en un interés por el diseño de modas, y una afición por la historia es lo que impulsó su línea de joyería: Gentlecat. Con esta explora por primera vez la producción de artículo basado en un diseño propio.
En cuanto a la dificultad de dar a conocer tu marca en un principio, Sara Arámburo ve una diferencia entre lo que aprendió y lo que se vive en el país: “Creo que hay una enorme brecha en la educación (en México) en que a los estudiantes de moda que tienen propuestas de diseño únicas no se les dice cómo van a conectar con la gente”.
Por su parte, la moda ha tomado relevancia en su marca de manera orgánica, al igual que el interés de sus consumidores. Así, seis años después del lanzamiento de Gentlecat, llega la colección de moda Courioser and Courioser 2019, desarrollada en colaboración con Alfajor Wear Studio.
En esta colección retoma la estética de Alicia en el País de las Maravillas: los colores predominantes son azul, rosa y negro; los olanes, pliegues y faldas con volumen se unen a ilustraciones basadas en la novela de Lewis Carroll.
Con Sara, el estilo reflejado en su trabajo, desde ilustraciones hasta la moda, se vuelve parte de su vida cotidiana. Para la diseñadora, la moda es parte de la personalidad y su consumo representa un reto, sobre todo en contextos actuales donde domina el Fast Fashion.
Enfocada en el proceso de producción y el impacto ambiental que representa la moda, Sara crea su estilo a partir de piezas que ella misma produce o que obtiene de tiendas de segunda mano, tanto japonesas como jaliscienses, de tiendas vintage y mercadillos.
Para Sara Miau la calidad seguirá siendo el eje principal de su producción. “A la marca de moda le quiero dar un giro específico, me gustaría producir cosas de estilo Lolita”, comentó. Esto manteniendo la producción de prendas en cantidades limitadas, pues su creación depende de la obtención de materiales que cumplan los estándares de calidad de su marca.
A la par del desarrollo de colecciones, Arámburo continúa como ilustradora y co-directora del centro cultural Casa Teodora, en el que se coordinan talleres enfocados al ámbito creativo.
El estudio de Sara Miau se encuentra dentro de las instalaciones de Casa Teodora | Justo Sierra 1828, Col. Americana.
En su página de facebook e instagram podrás encontrar más sobre sus diseños y próximas colecciones.