10. Palo Santo / Years & Years
El joven trío británico presentó su segundo álbum de estudio. Si bien mantuvo su pop fresco y original, la banda logró dotar a su estilo de cierta evolución musical. Si bien, sus líricas continuaron con reflexiones ligadas a la religiosidad, éstas se vieron envueltas en imágenes más paganas sobre el cuerpo y la sexualidad. Con los ritmos más dóciles y hasta bailables de Palo Alto, Years & Years logra quedarse en la memoria musical contemporánea.
9. Invasion of Privacy / Cardi B
Con Invasion Of Privacy, la rapera estadounidense concretó el éxito que había esparcido en múltiples plataformas. Desde su pasado como estríper hasta su participación en el reality Love & Hip Hop: New York, 2018 fue la cereza en la carrera de esta artista. Su propuesta renovada y urbana —con estilo agresivo pero siempre divertido—, Cardi B se cuela en los referentes de la música como una rapera que hace mella al legado de Minaj y Lil’Kim.
8. So Sad So Sexy / Lykke Li
El cuarto álbum de la cantante sueca es, por mucho, su apuesta más pop. Incorporando ritmos mucho más orgánicos y hasta sensuales, Lykke Li se sostiene como una de las letristas más entrañables de nuestro tiempo. Aun así, su nueva faceta no deja de ser melancólica y sutil, una paradoja por la que vale la pena apostar.
7. Negro Swan / Blood Orange
El cuarto álbum de Dev Hynes’ como Blood Orange es una de las piezas más íntimas del músico estadounidense. Sus letras y melodías no solamente nos acercan a las vivencias más personales del autor. Este disco es a la vez un recorrido por la historia de la raza negra en América y las depresiones que genera el racismo perenne de una sociedad podrida.
6. Vibras / J Balvin
El quinto disco de estudio del reguetonero es sin duda su pieza más madura. Caleidoscópica y de múltiples ritmos, la propuesta de este disco es sin duda abarcadora. Balvin demuestra que su capacidad musical es mayor que las tendencias generales del reguetón. Además, en este disco, nos presentó “Brillo”, una de las canciones más emblemáticas del género que puso en escena a nada más y nada menos que Rosalía.
5. Sweetener / Ariana Grande
Su consolidación como icono pop. Un disco mucho más aterrizado y, aunque acaso carente de anatemas de la festividad, mucho más redondo. Con este material, Ariana deja claro que su intención es dejar una marca memorable y convertirse en un referente que trasciende generaciones.
4. Bloom / Troye Sivan
Un álbum sobrado de grandes piezas, con dos colaboraciones sorprendentes que confirman a Sivan como uno de los nombres medulares en la escena del pop contemporáneo.
3. Isolation / Kali Uchis
La cantante colombiano-estadounidense entregó su álbum debut y el que se convertirá sin duda en un referente generacional. Una mezcla entre Amy Winehouse y Selena, entre ritmos latinos y R&B, entre lo culto y lo popular. Su polifonía luce por su sencillez y transparencia. Una artista a la que sin duda habrá que seguirle la pista.
2. Honey / Robyn
El regreso de una de las figuras más emblemáticas del electropop tras 8 años de ausencia. Un álbum armónico y sereno con himnos imprescindibles para el 2018 como Missing You y Honey.
1. El mal querer / Rosalía
Una de las propuestas más frescas y auténticas del 2018. El surgimiento de la más grande estrella que ha dado España en años. Una mezcla compleja de géneros que hacen de El mal querer un álbum de culto.
