A tan solo de unas horas de presentarse en el Palacio de Bellas Artes en la Ciudad de México, entrevisté a Gilberto Aguirre, el vihuelista del Mariachi Vargas de Tecalitlán. Me contó sobre su carrera y sobre cómo es la vida de un mariachi. ¡Aquí te lo digo todo!
Gilberto, su vihuela y el Mariachi
El padre de Gilberto es violinista, fue él quien lo introdujo al mundo de la música. A los seis años, Gilberto comenzó a tocar la vihuela. Fue a los 13 cuando entró a su primer mariachi.
Ser parte del Mariachi Vargas de Tecalitlán había sido el sueño de Gilberto desde pequeño. Finalmente en 2013 se unió a esta agrupación y desde entonces ha participado en decenas de giras por todo el mundo con el Mariachi y con Luis Miguel.
México, Estados Unidos, Canadá, Guatemala, Colombia y países de Europa han sido algunos de los lugares que ha visitado como músico.
“En cualquier lugar yo siento lo mismo. El estar con la agrupación es disfrutarlo igual en todas partes. La gente responde de la misma manera en cualquier parte del mundo. Aunque no hablen español al escuchar la música del mariachi se emocionan. Esa emoción te la transmiten y uno lo hace con más empeño”.
Para Gilberto no ha sido difícil tocar la vihuela: “yo pienso que ningún instrumento es difícil si tú le dedicas su tiempo, empeño y dedicación”. Tal vez lo más complicado es iniciar pero si hay gusto por el instrumento no es difícil, opina.
El vihuelista trata de estudiar individualmente una hora al día. Además, ensaya con todo el Mariachi entre tres y cinco horas diferentes días de la semana. Los ensayos dependen del tiempo disponible, las giras y la carga de trabajo de la agrupación.
Para Gilberto es un gran orgullo ser mariachi y portar el traje de charro: “el traje de charro es algo que identifican en todo el mundo, en cualquier parte del mundo te paras, te ven con el traje de charro y dicen ‘México’. Es un orgullo y es algo que hay que hacer con responsabilidad”.
La vida como músico del Mariachi Vargas de Tecalitlán
Gilberto me contó que el Mariachi Vargas, de 120 años, tiene un repertorio base y únicamente cambian unas cuantas canciones al año: “la gente ya conoce la mayoría del show, hay clásicos que la gente va y quiere escuchar porque las conoce con el Mariachi”.
El mariachi no tiene una canción favorita, todas le gustan. Aunque si tuviera que elegir una sería “El Balajú”, canción que han tocado con Luis Miguel.
“Ha sido una satisfacción enorme el haber logrado algo que yo quería desde de muy chico. El sueño y la meta de cualquier músico en este género, es llegar lo más alto posible. Ha habido sacrificios, pero también demasiadas satisfacciones, como representar a México con el mejor mariachi del mundo, el Mariachi Vargas”.
Gilberto
Sin embargo, los conciertos favoritos del vihuelista son las Galas del Mariachi, donde tocan en ensamble con la Orquesta Filarmónica de Jalisco.
“Mi parte favorita es cuando hacemos fusión con la Orquesta Filarmónica. Yo todos los shows los disfruto, tan solo con pararme arriba de un escenario yo ya lo estoy disfrutando al 100%, pero me llena de emoción el estar con la Orquesta completa”.
Parte de lo que los 14 músicos del Mariachi Vargas deben cuidar es su imagen, su vestimenta, la puntualidad, la lectura musical y la ejecución de su instrumento.
¿Cómo es la vestimenta de un mariachi? El tapatío me describió su atuendo: traje de charro completo con la gala de plata (puede ser de gamuza o de “tela normal”), botines (de gamuza o charol), cinturón con hebilla de plata, moño que ellos por tradición lo usan como corbatín y sombrero de charro.
Trabajar con Luis Miguel
El Mariachi Vargas de Tecalitlán acompañó a Luis Miguel en su última gira que concluyó hace algunos días. Duró aproximadamente año y medio y fueron 149 presentaciones. Gilberto y el Mariachi estuvieron en todas y cada una de ellas.
“Trabajar con Luis Miguel fue una bonita experiencia. Conocer tantos lugares y trabajar al lado de ese gran artista fue satisfactorio. Buenos recuerdos van a quedar de esa gira”.
Su línea de vihuelas
Gilberto tiene su propia línea de vihuelas. Hace dos años, Alejandro Vivar, un lutier mexicano que vive en España, le hizo un instrumento que le gustó mucho. Más tarde, Alejandro y Gilberto lanzaron la línea de vihuelas Gilberto Aguirre de los Instrumentos Vivar.
“Esta idea me la propuso el fabricante. Él quería hacer una línea de instrumentos con mi nombre. Ya me habían hecho muchas propuestas, pero yo no me quería comprometer con nadie hasta estar 100% seguro que la calidad de los instrumentos respondía a mis necesidades”.
Sus vihuelas están hechas con finas maderas europeas que tienen un mínimo de 10 años de secado, por lo que la calidad del instrumento es muy buena.
“El precio del instrumento es un poco más el evado pero la calidad es muchísimo mejor y tiene una garantía de que no se va a torcer, ni se va a vencer porque las maderas son seleccionadas y son únicas y exclusivas para instrumentos”.
Próximamente Gilberto y el Mariachi Vargas de Tecalitlán se estarán presentando en Cancún, Veracruz, Puebla y Los Ángeles. ¡Sin duda estaremos atentos de la próxima vez que estén en tierras tapatías!
